La compraventa de una vivienda protegida en la Comunidad de Madrid es un proceso específico que está sujeto a una serie de normativas y restricciones. Estas viviendas, también conocidas como Viviendas de Protección Oficial (VPO), ofrecen una oportunidad de acceso a la vivienda a precios más asequibles, pero conllevan ciertas particularidades tanto para el comprador como para el vendedor. En este artículo, abordaremos los aspectos clave de la compraventa de vivienda protegida en la Comunidad de Madrid.

¿Qué es una Vivienda Protegida?

Una Vivienda de Protección Oficial (VPO) es una vivienda que ha sido promovida por administraciones públicas o entidades privadas con el apoyo de ayudas públicas. Estas viviendas tienen un precio de venta y alquiler limitado, y están destinadas a personas o familias con ingresos que no superen ciertos límites.

Requisitos para la Compraventa de una Vivienda Protegida

Para el Comprador

1. Ingresos máximos: El comprador debe tener unos ingresos familiares que no superen un determinado límite, que varía según el tipo de vivienda protegida y el tamaño de la familia.
2. No poseer otra vivienda: En general, los compradores de una vivienda protegida no deben ser propietarios de otra vivienda, aunque existen excepciones en casos específicos.
3. Residencia y empadronamiento: En algunos casos, es necesario estar empadronado en la Comunidad de Madrid o en el municipio donde se ubica la vivienda.

Para el Vendedor

1. Autorización de venta: Si la vivienda está aún en el periodo de protección, el vendedor debe solicitar autorización para la venta a la Dirección General de Vivienda de la Comunidad de Madrid.
2. Precio máximo de venta: El precio de venta de la vivienda no puede superar el límite establecido por la normativa vigente.
3. Devolución de ayudas: En algunos casos, el vendedor debe devolver las ayudas públicas recibidas, especialmente si la venta se realiza antes de que expire el periodo de protección.

Pasos para la Compraventa de una Vivienda Protegida

1. Comprobar el Régimen de Protección

Antes de iniciar la compraventa, es fundamental comprobar el régimen de protección de la vivienda. Esto se puede hacer a través del Registro de la Propiedad o consultando la escritura de la vivienda.

2. Solicitar Autorización

Si la vivienda aún está en el periodo de protección, el vendedor debe solicitar la autorización de venta a la Dirección General de Vivienda. Esta solicitud debe incluir la documentación que acredite el cumplimiento de los requisitos y el motivo de la venta.

3. Tasación de la Vivienda

Una tasación oficial es necesaria para determinar el precio máximo de venta de la vivienda protegida. Esta tasación debe ser realizada por un tasador homologado.

4. Formalizar el Contrato de Compraventa

Una vez obtenida la autorización y establecida la tasación, se puede proceder a formalizar el contrato de compraventa ante notario. Este contrato debe cumplir con todas las condiciones establecidas por la normativa de viviendas protegidas.

5. Inscripción en el Registro de la Propiedad

Finalmente, la compraventa debe ser inscrita en el Registro de la Propiedad. Esto es esencial para que el nuevo propietario tenga pleno derecho sobre la vivienda y para que se actualice el régimen de protección, si procede.

Documentación Necesaria

Para llevar a cabo la compraventa de una vivienda protegida, se requiere la siguiente documentación:

• Escritura de propiedad: Documento que acredita la titularidad de la vivienda.
• Certificado de ingresos: Para el comprador, para demostrar que cumple con los requisitos económicos.
• Autorización de venta: Emitida por la Dirección General de Vivienda (si es aplicable).
• Tasación oficial: Para establecer el precio máximo de venta.
• Contrato de compraventa: Firmado ante notario.

Beneficios y Limitaciones

Beneficios

• Precios asequibles: Las viviendas protegidas suelen tener precios más bajos que las viviendas libres.
• Ayudas y subvenciones: Los compradores pueden acceder a diversas ayudas y subvenciones que facilitan la adquisición de la vivienda.

Limitaciones

• Restricciones de venta: Durante el periodo de protección, la venta de la vivienda está sujeta a autorización y limitaciones de precio.
• Requisitos para el comprador: No todas las personas pueden acceder a una vivienda protegida debido a los límites de ingresos y otros requisitos.